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13 comentarios:
Por Karina Chan Castillo
Docente UPN 302, Veracruz, Ver.
¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y determinan la respuesta educativa?
De forma importante, ya que cada alumno que presente una situación de cuota fija es diferente a otro y aunque la institución hubiera planeado su trabajo con ellos, se tendría que modificar para cada uno, así cada uno va respondiendo de acuerdo a su avance.
Por Manuel Antonio González Cano
Egresado de la LIE, EPJA.
Unidad 302, Veracruz, Ver.
1. ¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y determinan la respuesta educativa?
Creo que la institución escolar no valora cuotas fijas, y creo que en México la SEP tampoco lo hace. Se supone que se trabaja el promedio de lo que un niño puede aprender en un año lectivo dado, sin embargo, desconozco con base en qué lo hacen, pero no creo que lo hagan por medio de una “valoración de cuotas fijas”, lo que supondría que la SEP hiciera constantes evaluaciones de las capacidades de los alumnos, y no sólo de los alumnos, sino del sistema, de la currícula, de los profesores, de las políticas de enseñanza, de los planteles, etc. Ahora bien, si es que tomamos como un supuesto que las instituciones de enseñanza valoren un cuota fija, esto a lo único que lleva es a que el docente fije metas que no corresponden con la realidad, pues es sabido que una valoración, es decir una medición, o lo que sea a que se refiera uno sobre medir el potencial del alumno, es sólo un indicador de qué es lo que un alumno podría aprender bajo ciertas condiciones, pero de ningún modo indican que es lo único que un alumno podría aprender.
¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las
cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y
determinan la respuesta educativa
Considero que lo que comúnmente se valora en las escuelas influye
considerablemente en las expectativas de los docentes y lleva
a "definir", "describir" a determinados niños en función de ciertas
características que se supone obstaculizan o facilitan el
aprendizaje. Esta "valoración" fomenta la etiquetación, la
segregación….la exclusión. Así tenemos alumnos capaces vs
incapaces, los buenos vs los malos, los que aprenden vs los que no
aprenden, los sanos vs los enfermos, los normales vs los anormales,
los que si vs los que no aprovechan las oportunidades y que además
hay que enseñar de modo distinto, y como son "especiales" requieren
formas especiales de enseñanza.
Por esta visión vemos niños trabajando-por mucho tiempo- con
el "especialista" o solos. Esto es perjudicial pues se aprende
mejor cuando se participa en actividades con otras personas, se
adquiere confianza, por el apoyo que los compañeros aportan.
Esta valoración también ha llevado a buscar la igualdad-mal
entendida. A todos se les enseña por igual, y como tal, a todos se
les exige por igual. Esto tiene repercusiones al momento
de "evaluar conocimientos" en la que se compara a este niño respecto
de aquello que pueden los otros, se espera lo mismo de todos. No se
evalúa considerando las capacidades, potencialidades, necesidades y
peculiaridades, como sucede con la torre de Pisa. ¿Por qué no
admirar, disfrutar, su belleza peculiar? Por qué su verticalidad
tiene que ser "defectuosa" Por qué el afán de "perfección".
En aras de lograr o tener lo "mejor", lo "perfecto" –en
educación-terminamos por no respetar lo peculiar, lo diverso, lo
diferente colocándonos en una posición, que fomenta o crea barreras
que limitan el aprendizaje.
POR ESTANISLAO AZUARA CHAVEZ
DOCENTE UPN HIDALGO
Una reflexión en torno a las cuotas fijas:
¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las
cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y
determinan la respuesta educativa?
-Considero que las cuotas fijas no deberían de estar en una
institución, Ya que estas limitan el desarrollo y las
potencialidades de los alumnos y al mismo tiempo no cubren las
necesidades y expectativas que tienen los mismos.- Ya que en una
situación me presentaba el plan y programa de primarias un contenido
que estaba muy bajo de acuerdo al nivel de conocimientos que
presentaba el grupo por lo que tuve que implementar actividades mas
complejas que el programa no indicaba y el grupo respondió muy bien,
por lo que no debemos de limitarnos y considerar que eso es lo único
que puede aprender el alumno como si el potencial de los niños no
pudiera rebasar las expectativas que ofrece el plan y programas de
estudio de educación primaria.
POR FELICITA GARNIQUE CASTRO
> DOCENTE UPN, MÉXICO, D.F.
>
> ¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las
> cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y
> determinan la respuesta educativa
>
>
> Considero que lo que comúnmente se valora en las escuelas influye
> considerablemente en las expectativas de los docentes y lleva
> a "definir", "describir" a determinados niños en función de
ciertas
> características que se supone obstaculizan o facilitan el
> aprendizaje. Esta "valoración" fomenta la etiquetación, la
> segregación….la exclusión. Así tenemos alumnos capaces vs
> incapaces, los buenos vs los malos, los que aprenden vs los que no
> aprenden, los sanos vs los enfermos, los normales vs los
anormales,
> los que si vs los que no aprovechan las oportunidades y que
además
> hay que enseñar de modo distinto, y como son "especiales"
requieren
> formas especiales de enseñanza.
>
> Por esta visión vemos niños trabajando-por mucho tiempo- con
> el "especialista" o solos. Esto es perjudicial pues se aprende
> mejor cuando se participa en actividades con otras personas, se
> adquiere confianza, por el apoyo que los compañeros aportan.
>
> Esta valoración también ha llevado a buscar la igualdad-mal
> entendida. A todos se les enseña por igual, y como tal, a todos
se
> les exige por igual. Esto tiene repercusiones al momento
> de "evaluar conocimientos" en la que se compara a este niño
respecto
> de aquello que pueden los otros, se espera lo mismo de todos. No
se
> evalúa considerando las capacidades, potencialidades, necesidades
y
> peculiaridades, como sucede con la torre de Pisa. ¿Por qué no
> admirar, disfrutar, su belleza peculiar? Por qué su verticalidad
> tiene que ser "defectuosa" Por qué el afán de "perfección".
>
> En aras de lograr o tener lo "mejor", lo "perfecto" –
en
> educación-terminamos por no respetar lo peculiar, lo diverso, lo
> diferente colocándonos en una posición, que fomenta o crea
barreras
> que limitan el aprendizaje.
>
Por Mario Ridaura
> > UPN Mexicali, B.C.
> >
> > En cuanto a las cuotas fijas, que es de donde sale la idea de
> > cotidiano, o cuotidiano, de acuerdo a la normatividad, la escuela
> > realiza la planificación de acuerdo a la razón, que es de verdad
> > amplia y comleja, en ella caben las cuotas fijas, si se nota un
pco
> > de soberbia en la practica de la razón en la planificación, es lo
> > que nos dice que si hay un superdotado en inteligencia, de todos
> > modos lo contiene la razón por que pocos son los que captan la
vida
> > de la razón; entonces el hecho de que de todos modos el de
> > coeficiente intelectual alto caiga en la razón o se potencie a
> > través de la razón -que ha planificado este espacio de
desarrollo
> en
> > la escuela- es decir, tiene contemplado el desarrollo de un
> > superdotado en inteligencia pero no lo dice, igualmente el
maestro
> > dentro del aula; el problema que veo es qué se va a hacer con un
> > superdotado desde el maestro y desde la escuela; para mí se
tendría
> > que trascender el sistema imperante y centrarse en el niño y
> adaptar
> > la escuela y al maestro a él. Y de aquí se pueden manejar como
> > cuotas potenciales a incrementar las de todos los demás alumnos.
> > Pero si creo que hay una especie de soberbia tanto en la escuela
> > como en el maestro que no desean contemplar las cuotas fijas.
> >
De:: ARCELIA EDITH NAVA PRECIADO
Asunto: respuestas
Fecha: miércoles, 25 junio, 2008, 2:52 pm
¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y determinan la respuesta educativa?
De manera crucial porque desafortunadamente se convierten en un “lastre” con el cual la persona carga a lo largo no sólo de su vida escolar, sino de toda su existencia, el considerar a una persona con capacidades inamovibles y permanentes echa por tierra muchas teorías y concepciones educativas y psicológicas, la misma función de la educación carecería de sentido porque no se lograría el desarrollo del ser humano, permanecer fijo, estable e invariable es contrario a la naturaleza humana, en cualquier ámbito, sean cuales sean las características, la capacidad de cambiar, de evolucionar es algo propio de la mujer y del hombre.
Por Ruth Guadalupe
Docente UPN Iguala, Gro.
¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y determinan la respuesta educativa?
Definitivamente este aspecto repercute en el alumno ya que esto limita y impide explotar al máximo las cualidades y capacidades de los alumnos.
Marysol Ochoa
Unidad 031, La Paz B.C.S
¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y determinan la respuesta educativa?
Creo que las cuotas fijas limitan el aprendizaje en el aula. Recibir el material de los “paqueteros” como diría Freire, no debe limitar la labor del docente. A pesar de recibir instrucciones precisas de cómo desarrollar una clase (desde los materiales hasta la metodología), el docente, dentro de su aula, puede enriquecer y modificar la manera en que abordará los temas. La creatividad y la iniciativa rebasan esas cuotas fijas, las expectativas deben rebasar las cuotas fijas.
Por: Brenda Lizeth Barraza Molina.
Alumna de UPN 08B.
Cd. Juárez, Chihuahua
¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y determinan la respuesta educativa?
Considero que intervienen de manera definitoria, ya que si al alumno se le determina su posible futuro y se le hace ver que no puede dar más allá de lo que puede hacer en el instante, éste pierde la motivación por aprender y su esfuerzo para mejorar su rendimiento es mínimo. Además que durante toda su vida escolar-social carga con una etiqueta mental que se le refuerza a cada instante.
Marysol Ochoa
Unidad 031, La Paz B.C.S
¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y determinan la respuesta educativa?
Creo que las cuotas fijas limitan el aprendizaje en el aula. Recibir el material de los “paqueteros” como diría Freire, no debe limitar la labor del docente. A pesar de recibir instrucciones precisas de cómo desarrollar una clase (desde los materiales hasta la metodología), el docente, dentro de su aula, puede enriquecer y modificar la manera en que abordará los temas. La creatividad y la iniciativa rebasan esas cuotas fijas, las expectativas deben rebasar las cuotas fijas.
Por Leticia Sánchez Tetumo
Docente de la Unidad UPN 302
VeracrUZ, Ver.
Considero que la expectativa docente en varios casos es determinante en la valoración de la respuesta educativa en tanto que, esta expectativa ayuda a conformar un halo del alumno en el cual intervienen factores de índole subjetivo que impiden que el educador pueda observar con objetividad las fortalezas o también las debilidades de su estudiante. Esto provoca que elabore prejuicios sobre el alcance de la respuesta y retroalimente en consecuencia al niño positiva o negativamente, creando en él falsas creencias acerca de sus verdaderas posibilidades y por consecuencia se autocalifique como incapaz o sobre valore sus posibilidades.
Por: Fely garnique castro
Docente UPN 097, México, D.F.
¿De qué manera crees que las expectativas docentes respecto a las cuotas fijas valoradas por la institución escolar, intervienen y determinan la respuesta educativa?
Considero que lo que comúnmente se valora en las escuelas influye considerablemente en las expectativas de los docentes y lleva a “definir”, “describir” a determinados niños en función de ciertas características que se supone obstaculizan o facilitan el aprendizaje. Esta “valoración” fomenta la etiquetación, la segregación….la exclusión. Así tenemos alumnos capaces vs incapaces, los buenos vs los malos, los que aprenden vs los que no aprenden, los sanos vs los enfermos, los normales vs los anormales, los que si vs los que no aprovechan las oportunidades y que además hay que enseñar de modo distinto, y como son “especiales” requieren formas especiales de enseñanza.
Por esta visión vemos niños trabajando-por mucho tiempo- con el “especialista” o solos. Esto es perjudicial pues se aprende mejor cuando se participa en actividades con otras personas, se adquiere confianza, por el apoyo que los compañeros aportan.
Esta valoración también ha llevado a buscar la igualdad-mal entendida. A todos se les enseña por igual, y como tal, a todos se les exige por igual. Esto tiene repercusiones al momento de “evaluar conocimientos” en la que se compara a este niño respecto de aquello que pueden los otros, se espera lo mismo de todos. No se evalúa considerando las capacidades, potencialidades, necesidades y peculiaridades, como sucede con la torre de Pisa. ¿Por qué no admirar, disfrutar, su belleza peculiar? Por qué su verticalidad tiene que ser “defectuosa” Por qué el afán de “perfección”.
En aras de lograr o tener lo “mejor”, lo “perfecto” –en educación-terminamos por no respetar lo peculiar, lo diverso, lo diferente colocándonos en una posición, que fomenta o crea barreras que limitan el aprendizaje.
Enviado 24 de junio 2008
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